El Comité Transparencia por Santander sobre la veeduría realizada al Programa de Alimentación Escolar -PAE- Santander 2022 entregó el balance sobre lo realizado este año. Aunque hubo mejoras en muchos aspectos, las revelaciones indican que todavía se está muy lejos de alcanzar el ciento por ciento de la calidad que se requiere para que los beneficiarios no tengan riesgo en su salud.
El CTS es una veeduría cívica a la gestión pública en el departamento de Santander, a través del seguimiento y control a los procesos de contratación pública tanto en su fase precontractual como de ejecución, con el fin de
resguardar el cumplimiento de los principios de la gestión pública y procurando por asegurar condiciones de competitividad y libre concurrencia y el respeto al principio de transparencia y eficiencia administrativa, revela el mismo Comité sobre la tarea que realiza.
Dice además en su presentación que atendiendo a la importancia que reviste el Programa de Alimentación Escolar, el Comité Transparencia por Santander, realiza una veeduría técnica especializada, para verificar el cumplimiento de cada uno de los requisitos contemplados por el Ministerio de Educación para su óptimo desarrollo.
Para ello efectuaron visitas a bodegas y sedes administrativas de cada operador y sedes educativas donde se entrega el complemento nutricional a los beneficiarios en cada una de las modalidades de ejecución del PAE.
Los veedores realizan la verificación en sitio de la ejecución del programa, evaluando los aspectos, según el formato de verificación aportado por el Ministerio de Educación Nacional, a través de la UApA (Unidad de alimentos para aprender).
Esos aspectos son: Instalaciones físicas y Sanitarias. Cumplimiento de menús- gramajes. Calidad productos entregados. Personal manipulador. Condiciones de saneamiento. Transporte. Verificación Documental. Salud ocupacional. Gestión social.
Al término de la presentación oficial del informe a los medios de comunicación, la vocera del Comité Transparencia por Santander, Marcela Pabón, aceptó el diálogo sobre los aspectos que más inquietaban.
Entrevista a la vocera
¿Cuál es el balance inicial entre lo qué pasó en el año 2021 y lo que pasó en este 2022 en relación a la veeduría sobre el Plan de Alimentación Escolar -PAE- en Santander?
Marcela Pabón, vocera del Comité Transparencia por Santander: En la revisión que hemos realizado sobre la ejecución del Programa de Alimentación Escolar -PAE- en este año 2022, las condiciones en todas las entidades fueron calificadas como aceptables, es decir, todavía existen algunas cosas que hay que mejorar, algunos aspectos muy importantes por mejorar. Pero en general las condiciones fueron aceptables en todas las entidades.
¿Y cuáles municipios se rajaron en el tema del PAE?
Las deficiencias más notorias que pudimos evidenciar, primero se trata de infraestructura, tenemos unos colegios con unas condiciones en los restaurantes escolares muy deplorables, es necesario hacer una inversión importante tanto en infraestructura como en menaje y en todos los equipos de cocina para garantizar la prestación del servicio. También condiciones como, por ejemplo, la desinfección de las frutas. Es muy importante mejorar ese aspecto porque puede causar algún tipo de problemas en los niños beneficiarios. Hay algunos casos puntuales, como el tema de la Gobernación de Santander, donde no se nos permitió la entrada a tomar las muestras microbiológicas, sin ninguna razón aparente y pues es violatorio a nuestro derecho a ser control social a este programa. Pero en general, las condiciones de los programas se cumplieron.
¿Los operadores están al día, han trabajado bien, hay cosas que apretar?
Hay algunas entidades, hemos incluido para Bucaramanga, por ejemplo, tiene unas ciertas demoras para el pago de los operadores y eso, pues también causa que haya algún tipo de malestar, sobre todo en las manipuladoras de alimentos que son las personas que atienden a los niños directamente.
¿Cuáles se rajaron y en qué fallaron?
Nosotros enviamos mensualmente los hallazgos que encontramos en nuestras visitas a las entidades para que ellos realicen las acciones de mejoras correspondientes. La mayoría de los municipios nos devuelve con acciones de mejora, excepto la Gobernación de Santander, que no nos ha aportado ningún plan de mejora de los hallazgos que nosotros le comunicamos.
Con lo observado en estas visitas ¿qué proyecciones hay para mejorar en el año entrante?
Hemos emitido algunos informes, se conocen las entidades, allí se encuentran detallados cada uno de los aspectos que deben mejorar. Fundamental el tema de la limpieza y la desinfección de todos los alimentos y la garantía de que las instituciones cuenten con restaurantes escolares en óptimas condiciones para que no exista la contaminación cruzada de los alimentos y los niños, de pronto, no se enfermen con eso.
¿Cuáles son los municipios que tienen mejores condiciones y los que peor les fue en la verificación?
Todos tuvieron, en el semáforo que tiene el Ministerio de Educación para la calificación de las condiciones, todos obtuvieron una condición aceptable, es decir, estuvo en amarillo. Estuvieron todos en el mismo rango.
Cuando ustedes informan “se hace una visita” ¿a qué se refieren, qué se hace en una visita, una visita cómo se hace?
La visita consiste en que nuestros veedores, los cuales tienen total conocimiento del programa, van, visitan, tanto la bodega como el transporte, así como las instalaciones de los colegios donde se entregan los alimentos y se verifican las condiciones técnicas del cumplimiento del Programa de Alimentación Escolar, a través de los instrumentos que dispone el Ministerio de Educación y las Unidades de Alimentación para aprender.
¿Qué tipo de personal asiste a estas visitas?
Son nutricionistas, expertos y con mucho conocimiento sobre el tema, son dos nutricionistas.
En el tema de transporte ¿cómo le fue al PAE en Santander?
En general cumplieron con las condiciones mínimas que se requieren para el transporte, hay algunos que no cuentan con el concepto sanitario vigente y disponible para la verificación de las condiciones, pero en general el transporte estuvo aceptable.
Uno de los objetivos del PAE era que se utilizará más la producción local ¿cómo se presentó ese tema, se ha cumplido?
Sí, sobre todo en temas de Santander, en la Gobernación de Santander sí hubo un porcentaje de compras locales aceptable.
Cuando una de las veedoras explicó “se recibe la fruta, va en un furgón adecuado, se hace almacenamiento, temperatura adecuada, se hace una manipulación adecuada, pero al final el producto está en mal estado”. ¿Por qué todo está adecuado, pero el producto al final no está óptimo?
El problema es el tema de la desinfección del producto al entregarse al niño beneficiario porque, sobre todo, el tema de las frutas cuando se consume con cáscara. Los niños, ustedes entenderán, no tienen la cultura de lavarse las manos y lavar la fruta antes del consumo. Por lo tanto, si no existe esa garantía de que el producto se entregue desinfectado al niño, pues obviamente puede tener un riesgo de contaminación y generar problemas de salud.
Con lo que encontraron en la veeduría del PAE en el 2002 ¿consideran que el tema va bien o hay mucho por mejorar para el 2023?
Siempre hay cosas por mejorar, igual nosotros vamos a estar haciéndole seguimiento en el 2023, ya hemos también aportado nuestras recomendaciones a cada una de las entidades para que el 2023 existan mejores condiciones en la prestación del servicio.
Uno de los retos para el 2022 es que se regresara a la presencialidad ¿se ha cumplido ese proceso?
Sí. Ya es una obligación que sea ciento por ciento presencial y en ese sentido se ha cumplido.
