Por: Camilo Andrés Maldonado Bautista/ Nuestro Hermano país de Venezuela está en una lucha interna por devolverle a sus ciudadanos los derechos que han sido usurpados y conculcados por un gobierno dictatorial, como ha sido perder su derecho a la libre opinión y la censura total de todos los medios de comunicación que no estén de acuerdo con las posturas del gobierno. Medios que fueron vendidos, cerrados y otros tomaron salidas poco éticas como la de cambiar sus líneas editoriales por el miedo de recibir represarías por parte de los estamentos estatales.
El caso de Radio Caracas Televisión RCTV fue distinto, conservaron su postura en la programación, lo cual les generó un ataque directo de intimidaciones tanto anónimas como públicas por parte del presidente Hugo Chávez, “Así lo adelanto a Venezuela. He ordenado revisar todo el procedimiento jurídico a través de los cuales se les dio la concesión a estos señores. La estamos revisando y si ellos no recuperan la normalidad en la utilización de la concesión, si ellos siguen utilizando la concesión para tratar de quebrar el país o derrocar el gobierno, pues yo estaría en la obligación de revocarles la concesión que se les ha dado para que operen los canales de televisión, no se extrañen si dentro de poco en Venezuela comenzamos a cerrar los canales de televisión”.
Tras la aprobación de la denominada Ley de Responsabilidad en Radio y Televisión, desaparecieron distintos programas de opinión en Venezuela y fue cancelada la concesión al canal RCTV, de esta manera se terminó su señal abierta y se iniciaba la censura total de los medios de comunicación que no fueran afectos al Chavismo.
La Corte Interamericana de Derechos Humanos propugna que los estados deben realizar la regulación de la actividad de los medios de comunicación y destaca que únicamente tendrán valides cuando se defienda el derecho a la libertad de expresión.
En Colombia la carta magna consagra en su artículo 20. “Se garantiza a toda persona la libertad de expresar y difundir su pensamiento y opiniones, la de informar y recibir información veraz e imparcial, y la de fundar medios masivos de comunicación. Estos son libres y tienen responsabilidad social. Se garantiza el derecho a la rectificación en condiciones de equidad. No habrá censura.”
En el año 2009 Señal Colombia medio de comunicación de propiedad del Estado y que se financia con recursos públicos provenientes de los impuestos pagados por los medios de comunicación privado y nuestros impuestos, los cuales también se invierten en los canales regionales como nuestro Canal TRO, lanzó un programa llamado “Los puros criollos”, el cual ha sido ganador de incontables premios a nivel nacional y cuenta con un libreto que nos lleva a esa Colombia de a pie que muchos de nosotros recorremos a diario, con temas tan populares como el de las arepas, el chance, el himno nacional, la fritanga, la carranga, los meseros, los amasijos, la gallina criolla, nuestro bocadillo veleño, los corrientazos y en fin una cantidad de historias que agradan y entretienen a miles de colombianos, al paso que exalta y valora las culturas y arraigadas costumbres populares.
Santiago Rivas presentador del programa declaró que saldrían de la parrilla de Señal Colombia luego de haber controvertido sobre la nueva ley Min tic de la cual tampoco estuvieron de acuerdo muchos líderes de opinión y personalidades de la política y el periodismo nacional, la cual sacaría del aire varios noticieros independientes que tendrían posturas críticas al gobierno actual.
El nuevo gerente del sistemas de medios públicos RCTV, expresó que no se presentaba ningún tipo de censura al programa, que se debía a un cambio en la programación de diciembre, debido a unas grabaciones publicadas por la liga contra el silencio la cual es manejada por la Fundación para la libertad de prensa FLIP, dejó en entredicho la imparcialidad de la nueva dirección para los medios públicos y la censura total por la postura de Santiago Rivas, enviando un mensaje negativo y autoritario, que aunque inicialmente lo negó, se conocieron grabaciones de audios que generaron la renuncia del nuevo gerente y dejó en el ambiente un amargo sabor a censura.
Programas con esta calidad son los que deben seguir siendo sostenidos por el Estado, pues nos brindan una parrilla diferente y constructiva para los colombianos, contenidos diferentes a las agobiantes series de narcos, drogas y prostitución entre tantos, que exaltan antivalores y envían una visión diferente y negativa de nuestra nación.
No podemos caer igual que en Venezuela, en este tipo de actuaciones arbitrarias y abusivas. Por el contrario, debemos seguir defendiendo la libertad de expresión y de conciencia, eso sí, castigando las noticias falsas o Fake News, la injuria o la calumnia, apoyando y propendiendo por un periodismo con responsabilidad y seriedad siempre buscando la verdad.
Muy triste la muerte de nuestros jóvenes cadetes policías, un acto terrorista inaceptable que merece nuestro total rechazo, como también de los líderes sociales. Así no se gana la confianza del pueblo ni se busca la paz, aunque las conversaciones deben seguir en búsqueda de parar la muerte de inocentes en un enfrentamiento sin sentido para el país.
Twitter: @camilo36858836
