Sandra Mason, la nueva presidenta de Barbados, fue elegida al cargo este miércoles por dos tercios de los votos de una sesión conjunta de la Cámara de la Asamblea y el Senado del país, un hito que enmarca el camino hacia la república de la isla.
El pasado 29 de septiembre el Parlamento votó reescribir la Constitución para poner fin a la asociación con la Corona británica y terminar con el estatus de monarquía constitucional con parlamento, con la reina Isabel II como jefa de Estado y al gobernador general como su representante en la isla.
Barbados no es la primera excolonia británica en el Caribe en convertirse en república, Guyana lo hizo en 1970, le siguieron Trinidad y Tobago en 1976 y Dominica en 1978. Barbados obtuvo su independencia en 1966, la nación de 288.000 habitantes había mantenido lazos con la monarquía británica durante mucho tiempo. Pero en los últimos años los pedidos de soberanía total y liderazgo propio se hicieron oír para convertirse ahora en una república.
Camino hacia la república
Sandra Mason, de 72 años, prestará juramento el 30 de noviembre, en el 55 aniversario de la independencia del país de Gran Bretaña. Exjurista que ha sido gobernadora general de la isla desde 2018, también fue la primera mujer en servir en la Corte de Apelaciones de Barbados.
Esta decisión convierte a Barbados, un pequeño país en desarrollo, en un miembro más legítimo en la política internacional. Barbados cuenta con una población mayoritariamente de origen africano.
La primera ministra de Barbados, Mia Mottley, afirmó que la decisión del país de convertirse en república no fue una condena de su pasado británico y espera continuar la relación con la reina Isabel II y enfocar los esfuerzos de la nación de cara a las dificultades causadas por la pandemia de Covid-19 y el cambio climático.
El cambio climático y pandemia han afectado a la isla
Barbados, la joya turística de las Antillas Menores en el Caribe, es conocida especialmente por la realeza anglosajona. La isla tiene una superficie de 430 kilómetros cuadrados y está situada a 300 kilómetros al este de Venezuela. Según datos del Banco Mundial, su economía depende del monocultivo de caña de azúcar, el turismo y las finanzas.
Mia Mottley, la primera ministra, señaló que la pandemia y el cambio climático han sido la tormenta perfecta para afectar la estabilidad de Barbados, lo que será el primer gran desafío para el país.
El antiguo primer ministro Freundel Stuart anunció en marzo de 2015 que el país sustituiría la monarquía por una república en 2016, lo que, de haberse llevado a cabo, hubiera coincidido con el 50 aniversario de la independencia de Barbados.
