A la ya aguda crisis que vive el sector lechero colombiano, ahora se le suman los efectos negativos del paro camionero que se manifiesta con bloqueos en las vías más importantes del país, impidiendo el tránsito. Estas protestas, motivadas por el aumento en el precio del ACPM, combustible indispensable para el funcionamiento del transporte de carga.
Estas manifestaciones que día a día empiezan a generar escasez de productos en las principales centrales mayoristas del país y aumentar el precio de la canasta familiar, también tienen consecuencias para el productor primerio, quien es en últimas el más perjudicado.
Ricardo Arenas, coordinador de cadenas productivas de Carne y Leche de la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán), informó en la mañana del jueves 5 de septiembre que ese sector estaba empezando a sufrir las consecuencias de los bloqueos. Es tan grave el asunto, según Fedegán, que a los productores les ha tocado, literalmente, llorar sobre la leche derramada.
“Ojalá pudieran todos los ganaderos que hoy están enredados con los bloqueos regalar la leche, pero por logística, en muchas fincas ni siquiera se puede sacar la leche para regalarla en alguna parte, hay que regarla, botarla, perder la producción de todo un día. Yo ayer tuve que ver de primera mano cómo necesariamente había que botar 800 litros de leche que es el 100% de la producción de un ganadero mediano de la Sabana de Bogotá”, comentó Arenas.
El profesional de Fedegán hace ver también que el problema no es solo de quienes tienen el producto en sus haciendas, sino también de los grandes compradores, quienes tienen los vehículos detenidos en las carreteras, a riesgo de perder todo.
“En algunas zonas la situación es más crítica que en otras, para la recolección de la leche; recordemos que es un producto perecedero y que si en cuatro o cinco horas no se han enfriado o no se ha recogido se daña. Adicionalmente, las fincas no tienen una capacidad de almacenamiento, así la leche se mantuviera por varios días, Si no las recogen, a las vacas hay que ordeñarlas dos veces al día, entonces se necesita desocupar el tanque o la cantina para la nueva leche”, explicó Ricardo Arenas.
A renglón seguido, hizo un panorama desalentador de los estragos económicos de cada día de bloqueo en las carreteras del país y deja entrever la dificultad de todos los productores de recuperar la inversión.
“La Sabana de Bogotá, algunas zonas de Antioquia, de Nariño, muchas zonas de Boyacá y Santander son las más afectadas, el Meta también tiene serios problemas, calculamos que en estos tres días se han tenido que perder el orden de 7 millones 900 mil litros en esos tres días, casi 8 millones de litros perdidos, del bolsillo del campesino, ganadero de leche”, alertó el coordinador de cadenas de Carne y Leche de Fedegán.
Finalmente, señala que esta situación agravará aún más la complicada situación del sector lechero, al tiempo que solicitan la activación de rutas que permitan el aprovisionamiento de los mercados y el tránsito de productos perecederos como la leche.
“Desde Fedegán tenemos claro que la protesta social es válida y deben llegar a un acuerdo que les sirva a todas las partes, inclusive a nosotros también nos afecta el incremento del diésel; pero si necesitamos de las autoridades y de los trasportadores, que permitan corredores humanitarios, corredores que dejen pasar los productos perecederos, principalmente la leche”, puntualizó Ricardo Arenas.
Propuesta de alza
Este viernes las vías amanecieron despejadas y la actividad ya parecía entrar en la normalidad y todos se sentirían ganadores, los transportadores porque al final el gobierno les propuso que el alza de 1.904 pesos se echaría para atrás y se dejaría solo en 200 pesos mensuales con cuatro alzas este año hasta solo llegar a los 800 pesos. El otro año no se haría el alza de 4.000 pesos anunciados por el gobierno en dos momentos del año 2025, todo entraría a negociarse de nuevo.
Para los transportadores es ganancia porque al final el alza de los 6.000 pesos decretado por el gobierno no se produce de un solo arrancón, en tres cambios, sino que se echa para atrás y solo se aumentaría en 800 pesos en este 2024.
Para el gobierno también sería ganancia porque, aunque no logra el aumento de los 6.000 pesos, de lograr el acuerdo con los transportadores de subir 200 pesos mensuales en cuatro momentos, le permitiría, sin lograr el objetivo inicial del alza de 6.000 pesos, descongelar los precios del ACPM que por alguna razón ‘acordada’ están congelados desde hace cinco años.
El gobierno aseguró que sobre esa decisión del alza de 800 pesos este año, de $200 mensuales, no se movería. Y sin que se anunciara la policía salió a despejar los puntos de bloqueo en varias ciudades, bloqueos que ya se tornaban violentos en momentos en que algunos transportadores querían continuar el trabajo, mientras otros, al parecer con infiltrados de sectores ajenos al camionero, atacaban a quienes no querían seguir en el paro.
APN Noticias
