El pasado 20 de julio como colombianos celebramos los 213 años de independencia de nuestra nación, celebración que tuvo un tinte especial debido al reciente fallo del Tribunal Internacional de la Haya que puso fin a las pretensiones expansionistas de Nicaragua sobre el Mar Caribe colombiano.
Por: Jhon F Mieles Rueda/ En vista de que en pocos días también se estarán conmemorando los 204 años de la Batalla de Boyacá, echaremos un vistazo a los acontecimientos que dieron como resultado que hoy seamos una nación independiente conformada por ciudadanos libres e iguales ante la ley (al menos en teoría).
La independencia de Colombia fue un proceso histórico de gran importancia que marcó el comienzo de una nueva era para el país, en la cual se liberó del dominio colonial español y se estableció como una nación soberana.
El proceso de independencia de Colombia se presentó en un contexto de cambio y expresión política en América Latina. El dominio español en la región había perdurado durante siglos, pero a fines del siglo XVIII y principios del XIX, el espíritu de libertad y los ideales de la Ilustración comenzaron a extenderse entre las élites intelectuales y la población en general.
En Colombia, varios factores contribuyeron al deseo de independencia. La invasión de las tropas napoleónicas a España, las ideas de la Ilustración, como la igualdad, la libertad y la soberanía popular, se difundieron a través de libros, periódicos y la correspondencia entre intelectuales y líderes políticos. Además, las luchas por la independencia en otros países de América Latina, como Estados Unidos y Haití, sirvieron de inspiración y ejemplo para aquellos que buscaban liberarse del dominio español.
La independencia de Colombia se produjo a través de una serie de eventos y batallas clave. En 1810, se produjo el Grito de Independencia en la ciudad de Bogotá, marcando el inicio del proceso independentista. Sin embargo, la lucha por la independencia fue larga, difícil y costosa. Las fuerzas realistas españolas resistieron ferozmente y hubo numerosos enfrentamientos y conflictos armados a lo largo de los años que dejaron miles de víctimas.
Sin duda alguna el líder más destacado de la independencia colombiana fue Simón Bolívar, conocido como El Libertador. Bolívar fue una estrategia militar y político visionario que desempeñó un papel fundamental en la lucha contra el dominio español en la región. Junto con otros líderes destacados, como Francisco de Paula Santander, Antonio Nariño y Camilo Torres, Bolívar condujo a las fuerzas independentistas a través de una serie de batallas y campañas militares que finalmente consiguieron la liberación de Colombia.
Una de las batallas más significativas fue la Batalla de Boyacá, librada el 7 de agosto de 1819. En esta batalla, el ejército independentista, liderado por Bolívar, obtuvo una victoria decisiva sobre las fuerzas realistas. Esta batalla marcó un punto de inflexión en la guerra de independencia y allanó el camino para la liberación de gran parte del territorio colombiano.
Después de la victoria en Boyacá, el Congreso de Angostura fue convocado en 1819 para establecer un gobierno independiente en Colombia. En este congreso, Bolívar pronunció su famoso Discurso de Angostura, en el que delineó su visión para la nación recién independizada. Se estableció una nueva constitución y se creó la Gran Colombia, una república que se estableció a los territorios de Colombia, Venezuela, Ecuador y Panamá.
Sin embargo, la Gran Colombia logró perdurar por mucho tiempo y debido a luchas internas, se disolvió en 1831. A partir de entonces, Colombia se convirtió en una república independiente, aunque experimentó períodos de inestabilidad política y conflictos internos a lo largo de los años.
A lo largo de los siglos XIX y XX, Colombia se enfrentó a numerosos desafíos, como guerras civiles, conflictos fronterizos, el auge y declive del narcotráfico y la lucha contra grupos armados ilegales. Sin embargo, también hubo períodos de progreso y estabilidad, en los que se impulsaron reformas sociales, económicas y políticas.
En la actualidad, Colombia es una nación soberana con una economía en crecimiento. Aunque aún enfrenta desafíos, el país ha logrado avances significativos en áreas como la reducción de la pobreza, la expansión de la educación y el fortalecimiento de las instituciones.
También ha consolidado su identidad cultural, en la que se mezclan las raíces indígenas, africanas y europeas. Además, se ha convertido en un actor importante en la región ya nivel internacional, promoviendo la paz, la cooperación y los derechos humanos.
Sin embargo, uno de los logros más significativos ha sido consolidarse como una nación democrática en la que todos tenemos la oportunidad de elegir y ser elegidos para cargos de elección popular, si bien aún existen ciertas falencias, lo cierto es que somos uno de los países más democráticos del continente, aún por encima de Estados Unidos.
En conclusión, la independencia de Colombia fue un proceso largo y arduo que involucró la participación de líderes valientes y el sacrificio de muchos. A lo largo de los años, hemos evolucionado como nación soberana, enfrentando desafíos y aprovechando oportunidades para avanzar en nuestra búsqueda de desarrollo y bienestar.
La independencia fue solo el comienzo de un viaje continuo hacia la construcción de una Colombia más próspera, justa e inclusiva. Ahora nos toca a nosotros seguir haciendo patria trabajando arduamente por sacar adelante a nuestras familias, y sobretodo, con ocasión a las próximas Elecciones Territoriales, sabiendo elegir muy bien a nuestros gobernantes.
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*Escritor, agroforestal y político local.
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