Desde agosto del año pasado, el entusiasmo de los bumangueses por ver una ciudad con proyección económica y social ha caído. De hecho, desde agosto de 2013 los niveles de pesimismo no habían sido tan altos como los que se registran hoy y que se muestran en la encuesta bimestral de Gallup Poll.
El desánimo de la gente es justificable. Bucaramanga afronta una aguda ingobernabilidad producto de los procesos judiciales del alcalde Rodolfo Hernández, de su manera sui géneris de administrar y de la polarización política que ha desencadenado su odio y su maltrato a la oposición.
Pero no es solo la percepción de los ciudadanos la que ha variado significativamente, la opinión pública también le viene pasando cuenta de cobro al responsable de este caos administrativo. El Mandatario Local, según las cifras de la medición, muestran a un Hernández en divorcio con sus gobernados, una situación que tiende a empeorar, tanto para él como para la ciudad.
Percepción: Mal y empeorando
La encuesta de junio de Gallup Poll registra cifras poco halagadoras sobre la precepción que tienen los bumangueses sobre su ciudad. A la pregunta, ¿cree que las cosas en Bucaramanga están mejorando o empeorando? El 65 por ciento (1 punto porcentual más que en mayo pasado) respondió que las cosas están empeorando y solo en 30 por ciento (1 punto menos que mayo) dijo que estaban mejorando.
Esa apreciación que tienen los ciudadanos se basa en los altos niveles de inseguridad que ronda en todos los sectores residenciales, en la falta de atención real a los problemas que más los aquejan y a la situación de intermitencia que vive la alcaldía, derivado por la suspensión que le profirió la Procuraduría al alcalde por pegarle a un concejal.
Hace un año la percepción ciudadana comenzaba a ser preocupante, en ese momento el 45 por ciento de los bumangueses sentían que las cosas iban mal mientras que el 44 por ciento era optimista. Pese a ese ‘tirón de orejas’ el jefe del gobierno local no hizo nada para cambiar la idea negativa de los ciudadanos sobre la realidad de la ciudad.
Se desplomó la “aprobación”
La medición de Gallup Poll también calcula el nivel de aprobación o desaprobación del alcalde Hernández. En junio, en materia de cifras, las cosas también fueron adversas para el mandatario. De hecho se ‘rajó’.
A la pregunta, ¿usted aprueba o desaprueba como Rodolfo Hernández se desempeña como alcalde de Bucaramanga?, el 64 por ciento (9 puntos menos que en mayo pasado) respondió que si aprobaba su labor mientras que el 28 por ciento (8 puntos más que en mayo) dijo que la desaprobaba.
Los datos presentados permiten establecer que en materia de imagen favorable Hernández ha venido perdiendo terreno. Hace un año contaba con una aprobación del 80 por ciento y con una desaprobación de tan solo el 17 por ciento. El divorcio con la opinión pública es evidente.
Pero las cosas para el mandatario podrían ponerse peor, según el influyente encuestador santandereano y experto en marketing, Yamil Cure Ruiz. Durante las campañas políticas los candidatos ponen en evidencia las equivocaciones y los incumplimientos de los gobernantes, lo que cala en la gente y se evidencia en las encuestas.
Con estas cifras adversas, los niveles que le pueda transferir el alcalde a su candidato serán mínimas y esto podría generarle –si éste no suma por si solo- una derrota en las urnas.
