Quién pudiera imaginar que hace unos años, cuando Germán Vargas Lleras aún no había llegado a la Vicepresidencia de la República ni Rodolfo Hernández tenía en sus planes lanzarse a la arena política, eran íntimos amigos; una relación por fuera de los temas políticos.
Lo paradójico de esa antigua amistad no es por el mal genio que domina a los dos, tampoco por la visión de negocios ni mucho menos por la ideología; puesto que el primero es más tirando a la derecha y el segundo hacia la izquierda.
Lo verdaderamente extraño es que esa amistad se terminó, y en malos términos, cuando ambos ascendieron al poder y por culpa de las decisiones administrativas de lado y lado. El resultado es que cada vez que pueden se “atacan”, se tiran piedras, intentando ponerle popularidad a los temas con que se retan en el escenario público.
El último enfrentamiento se registró el viernes pasado, tras la visita del hoy candidato a la Presidencia a Bucaramanga, quien en una manifestación en la Plaza Cívica Luis Carlos Galán, en la que participaron unas 1500 personas, se escucharon fuertes reclamos.
Germán Vargas Lleras, le dijo públicamente al alcalde Rodolfo Hernández, que le había quedado grande la malla vial de Bucaramanga. La denuncia fue hecha cuando éste enumeraba proyectos que se efectuaron en la ciudad gracias a su gestión, primero como Ministro del Interior, luego como Ministro de Vivienda y por último, como Vicepresidente de la República, iniciativas que están próximos a realizarse.
Pero Rodolfo Hernández no dejó la lengua quieta y a manera de “desquite”, le madrugó el sábado a publicar unas fotos en las redes oficiales de la Alcaldía de Bucaramanga, donde recriminó la manera en la que los asistentes a la manifestación habían dejado la Plaza Cívica.
Mostrando una fotografías, Hernández dijo en Facebook: “Así dejará al país Vargas Lleras si lo eligen presidente? El candidato Vargas Lleras, que critica la gestión del alcalde, así dejó a Bucaramanga después del acto organizado por la maquinaria política”.
Sin embargo la respuesta del Mandatario Local solo tenía la intención de responder a las críticas del candidato presidencial, puesto que su comentario estuvo fuera de contexto, toda vez, al solicitar el préstamo de la Plaza Cívica, con ella se hacen una serie de pagos, incluyendo la limpieza del lugar (a cargo de la Emab) una vez culmina el evento.
Hace un año se registró otro incidente parecido, en ese entonces Vargas Lleras fungía como Vicepresidente. Tras la entrega de un proyecto de Vivienda de Interés Prioritario (VIP), el alcalde de Bucaramanga salió con otra de sus charadas, dijo en televisión regional que Vargas Lleras humillaba a los pobres entregándoles viviendas en actos públicos con recursos del Estado.
Cabe recordar que la gestión de recursos de los que se jacta Hernández, por la administración de los Peajes de Rionegro y Lebrija y que permitieron reactivar las obras del antiguo proyecto ZMB, fueron gracias a que el entonces Vicepresidente de la República autorizó que la concesión pasara directamente a manos de la Gobernación de Santander y de la Alcaldía de Bucaramanga.
Pese a que el alcalde Rodolfo Hernández ha querido salirle al paso a las críticas de Vargas Lleras, solo ha quedado en ridículo; por lo menos así lo califican sus detractores.