Por: Juana Yolanda Bazán Achury/ El senado de Colombia, aprobó en la semana que termina la Reforma Pensional, le faltaría el trámite en Comisión y plenaria de la Cámara de Representantes; el tema es de una gran complejidad, como quiera que se deben armonizar muchos aspectos, entre ellos garantizar que la mayoría de los colombianos ojalá todos al llegar a la edad de retiro tengan la garantía de una vida digna; el sistema debe buscar garantizar la justicia y viabilidad para las futuras generaciones.
La reforma es necesaria y se justifica por la falta de equidad, la insuficiente cobertura y la insostenibilidad financiera del sistema actual junto con el equilibrio fiscal.
La propuesta de un pilar equivalente a 2.3 Salarios de cotización para Colpensiones considera el presidente que es insuficiente, por lo que aspira que en los debates en la Cámara de Representantes, la cotización a Colpensiones se lleve como mínimo a 3 salarios; los tecnócratas en los análisis efectuados consideran que el aumento de la cotización mínima hacía Colpensiones propuesta por el Presidente por encima de 3 o 4 salarios mínimos, no es conveniente en la medida en que, sólo se favorecen las personas de altos ingresos, al asegurar pensiones más altas lo cual mantendría la inequidad en el sistema actual, además aumentaría el pasivo pensional y el riesgo de la sostenibilidad del mismo a la vez que, un umbral superior al aprobado en el senado pone en riesgo el sostenimiento del sistema en el mediano y en el largo plazo.
Sostienen que el sistema se volvería casi estatal en su totalidad y los Fondos Privados de Pensiones, entrarían en crisis porque les quedarían muy pocos afiliados teniendo en cuenta que la mayoría de cotizantes está en el umbral aproximado a 4 Salarios mínimos
Los cálculos de ANIF indican que, con el umbral de 2.3 Salarios mínimos se logra un importante ahorro en el pasivo pensional de 14.6 puntos porcentuales.
Estiman que el régimen de transición que se consagra en la reforma aumenta significativamente el pasivo pensional, el menor umbral favorece una transición más amplia, finalmente precisan que la financiación del sistema debe tener en cuenta un umbral menor que debe ser máximo de un salario mínimo y un régimen de transición más reducido que el propuesto en la reforma.
Es verdad que cada sistema tiene ventajas y desventajas, lo cierto es que en los Fondos de pensiones muy poca gente lograr acumular el capital necesario para poder pensionarse, y se ven obligados a recibir la devolución de los montos ahorrados, cuyo destino no garantiza el bienestar del adulto mayor.
Ahora bien, la estatización total de las pensiones, no es conveniente desde el punto de vista financiero en el mediano y en el largo plazo, por lo que el ahorro en los fondos Privados ha sido bastante exitoso en este y otros países de la región, es importante que los dos sistemas se complementes y no compitan, porque eso no tiene razón de ser, se debe avanzar hacia la posibilidad real de obtener la pensión en los sistemas.
Ahora bien, tampoco se puede desconocer que quienes no logran una pensión de salario mínimo en los Fondos Privados y no alcancen a cotizar el capital necesario para completar su pensión, el estado concurre con el bono pensional para garantizar el pago de la pensión mínima, en presencia de ciertos requisitos. (Art. 65 de la Ley 100, reglamentado por el Decreto Nacional 823 de 1996).
Los aspectos sobresalientes en lo aprobado hasta ahora tienen que ver con la garantía de aporte de subsidio para los adultos mayores que nunca cotizaron a pensión, a manera de pensión.
Es necesario que Colpensiones tenga los fondos necesarios para el pago de las pensiones en el régimen de prima media con prestación definida, recibiendo recursos por concepto de cotizaciones y de esta manera no dependa totalmente del Ministerio de Hacienda.
En el trámite del proyecto de ley el Senado, no aborda el estudio de las pensiones más altas del país, es algo que tarde o temprano el Estado Colombiano debe entrar a analizar, mientras existan pensiones altas y subsidiadas, los desequilibrios no se pueden superar.
Es necesario un manejo impecable de los recursos del sistema, porque solo así se pueden garantizar las pensiones a futuro.
Hacen falta dos debates en comisión y plenaria de la Cámara de Representantes, donde seguramente se introducirán modificaciones, se deben atender las recomendaciones de los expertos y de quienes han analizado a profundidad la situación pensional del país, esperamos que los representantes a la cámara se despojen de su condición política para lograr un buen resultado en esta reforma.
Tanto en nuestro país como en los países vecinos, el bienestar de las personas de avanzada edad depende del adecuado funcionamiento del sistema pensional, la encrucijada de los sistemas pensionales tiene que ver con aspectos como la desaceleración del crecimiento económico, el envejecimiento de la población, la informalidad laboral y las brechas de género.
Cada país enfrenta sus propias dificultades y ha adoptado enfoques diversos para garantizar la sostenibilidad del sistema de pensiones, se trata de avanzar buscando beneficiar a la mayor parte de la población.
Esperamos el resultado final para abrir el debate al respecto.
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*Exrepresentante a la Cámara por Santander.
