Rodrigo Lozada Pérez es un campesino oriundo del municipio de San Vicente de Chucurí, Santander, quien estuvo en medio de una guerra que no pidió. Afortunadamente ahora amanecer en su finca le renueva su deseo de seguir adelante por él, su familia, su cacao y “El Rubí” más hermoso de la región.
Los hechos de violencia que vivió la población de San Vicente de Chucurí en décadas anteriores y que derivaron en la presencia de grupos armados ilegales en esa tierra tan fértil, no fueron impedimento para que Don Rodrigo, como le dicen sus vecinos de cariño, siempre siguiera soñando con ver su tierra campesina nuevamente produciendo como en los mejores años, aquellos en los que los cultivos alimentaban a sus hermanos y a sus demás familiares.
Las épocas difíciles de horror y miedo para la familia Lozada se presentaron cuando los grupos subversivos hicieron que la población fuera objeto de extorsiones, asesinatos, abigeato y secuestros, obligando a que los campesinos vendieran los predios a bajo costo y consiguieran, con ese dinero, para pagar las vacunas exigidas, evitar retenciones ilegales, costear el rescate de las personas retenidas ilegalmente o prevenir el reclutamiento forzado de los más jóvenes.
Este fue el caso de la familia Lozada Pérez. Conformada por los padres y siete hermanos, trataban de vivir de la agricultura y el ganado, con la mala suerte de que su predio estaba ubicado en pleno epicentro de esta guerra, así que fueron sometidos por los diferentes grupos armados a pagar vacunas y vivir con un miedo permanente de perder la vida o alguno de sus seres queridos.
Durante años tuvieron que desplazarse para salvar sus vidas, llegar a ciudades desconocidas y padecer las dificultades de no encontrar trabajo pues lo que mejor sabían hacer era trabajar la tierra; pasaron muchas necesidades y sobrevivían el día haciendo lo que fuera para poder comer y seguir soñando con algún día regresar al campo.
Pero como se suele repetir coloquialmente, “el buen hijo vuelve a casa”. Con trabajo de la Unidad de Restitución de tierras, la justicia falló a favor de los hermanos Lozada Pérez, en mayo de 2016, ordenando la compensación por equivalencia económica a favor de Rodrigo y sus hermanos; una noticia que llenó de mucha esperanza a la familia y que les recordó que el sueño de estar nuevamente en el campo se estaba haciendo realidad.
Una vez compensados, Rodrigo Lozada decidió volver a San Vicente de Chucurí, donde pudo comprar “El Rubí”, un predio con todas las características que él y su familia necesitaban para implementar su proyecto productivo de cacao. Esta vocación no era fortuita, pues esta región está catalogada como una de las productoras de cacao de mejor calidad en el país, y representa el mayor ingreso económico en la región. Decidió meterse de lleno en este cultivo y crecer con él.
En la actualidad Rodrigo vive de nuevo del campo y para el campo afirmando: “La Tierra y las mujeres son lo más bello que hay y aquí estoy de nuevo como quería papá, porque esto fue lo que nos enseñó a hacer”.
Esta inspiradora historia hará parte del décimo capítulo de la segunda temporada de la serie ‘Tierra’. Cada domingo a las 9:30 p.m. por el Canal Institucional. Una serie original de la Unidad de Restitución de Tierras, que cada domingo pretende que los ciudadanos conozcan de cerca cómo el proceso de restitución está cambiando la vida de aquellos que fueron víctimas de despojo y abandono.