Es indudable que se han experimentado con la fotografía una serie de transformaciones reales en el mundo a raíz del cambio tecnológico, hemos visto como la tecnología se hace cada vez más accesible no sólo en la forma en que se toma la fotografía sino en la manera en que se distribuye y se da a conocer.
La fotografía va más allá de la simple imagen hecha, sino también hay que tomar en cuenta esa imagen distribuida y en especial el papel que cumple el Internet en esa distribución hoy en día.
El futuro de la fotografía es un enigma, involucra una visión compleja. Para muchos el boom que vive la fotografía en este momento tiene que llegar a un límite en que la imagen no va a ser necesaria por estar tan desbordada. Los seres humanos necesitamos de la fotografía, necesitamos ver para creer.
Actualmente la fotografía está considerada como un arte, esto es, la cámara fotográfica al igual que el pincel y el lienzo se ha convertido en una herramienta imprescindible para que muchos artistas expresen sus emociones.
Pero al igual que la mayoría del arte contemporáneo en la fotografía la idea que se vende es incluso más importante que la propia obra. Es decir, que la idea de la obra prevalece sobre sus aspectos formales.
La fotografía puede ser una obra de arte como lo es la pintura, el dibujo o la escultura. La fotografía artística no tiene nada que ver con las innumerables fotografías que se hacen todos los días por miles de personas, con su celular.
El fotógrafo utiliza la cámara, la luz y otros materiales como instrumentos artísticos, tal como el pintor utiliza el lienzo, las pinturas o los diferentes pinceles.
El fotógrafo no solo elige una imagen, determina su composición, la luz, el color… si no que también puede alterar el resultado final de la fotografía utilizando diferentes químicos, técnicas de impresión o materiales.
Como en cualquier otra forma de arte, la combinación o manipulación de estas herramientas y técnicas dependen del talento y de la habilidad del artista.
“Revelaciones: ¿Tiene futuro la fotografía?” es nuestro tema de esta emisión de Corrillos, el cual lo vamos a analizar con tres expertos de las artes audiovisuales de Santander, cada uno hace parte de una generación de la fotografía:
Saúl Meza Arenas, hijo de la historia de la fotografía, su padre fue uno de los pioneros de la fotografía social de Bucaramanga. Es Metalúrgico de profesión, su dedicación lo llevó a indagar en el mundo de la fotografía, ha sido formador por más de 30 años en la Unab. Premio Nacional de Fotografía en 1997 con su obra Venus de los Estoraques.
Mauricio Olaya, fotógrafo, periodista y comunicador social, Premio Nacional de Fotografía en 1992 con la obra “el niño Guane”, ha escrito y ha participado en la edición de 17 libros que le ha dado la vuelta al mundo. Los retratos de paisajes expresan su exquisitez por lo natural. Fue galardonado en 2019 por Corrillos.
Javier Valdivieso, maestro en Artes Audiovisuales y a quien, por pasión por la mujer, lo llevó a descubrir un mundo infinito a través de la fotografía, la música y el cine, todo esto, en lo que hoy es su día a día, lo ha llevado a fotografiar y trabajar con las mujeres más bellas del Departamento.