Desde antes de la elección de Germán Bahamón Jaramillo, Gerente de la Federación Nacional de Cafeteros (Fedecafé), el presidente, Gustavo Petro, empezó a incorporar en su discurso expresiones que hicieron pensar en que su intención no se limitaba a sugerir en aras de mejorar los procesos, que como en todas las entidades, son susceptibles de tal.
En ese entonces, Petro solicitó al Comité Nacional de Cafeteros suspender la elección de la que ya se sabía, Bahamón Jaramillo sería el vencedor, aduciendo que el personaje de marras además de escribir columnas en contra del mandatario se mostraba abiertamente hostil y contradictor en redes sociales. No obstante, al ruido hecho desde el gobierno nacional, la elección se cumplió sin ningún contratiempo y arrojando los resultados por todos conocidos con bastante anticipación.
La hostilidad del gobierno para con los empresarios de ese sector de la agroindustria, quedó en evidencia el pasado miércoles en el marco de la Gran Asamblea Nacional Cafetera convocada por el Ministerio de Agricultura y desarrollada en dos días en Bogotá.
Asistentes a la asamblea manifestaron su descontento por lo que consideran una falta de respeto por parte del gobierno nacional, pues, una vez ofrecidos los viáticos para los participantes de la asamblea, los abandonó a su suerte en Bogotá.
A renglón seguido, explicaron que, junto con la convocatoria a la reunión, se prometieron recursos a los cafeteros atendiendo a las distancias que debían recorrer para asistir a la Asamblea, así: $300.000 a quienes llegaban de municipios de Cundinamarca; $450.000 para los agremiados asentados en Antioquia y $600.000 para quienes fueron en representación de los productores del sur del país.
“Muchas personas tomaron la decisión de buscar su propio hospedaje y pasarle una factura a la Agencia Nacional de Tierras, de acuerdo a lo que la Agencia les prometió que les iba a pagar conforme a la distancia de su región de origen a Bogotá. Pero otros, que pueden ser unas 300 personas, no tienen dónde quedarse porque los recursos no fueron entregados. Unos lograron encontrar algún hotel, pero necesitan la plata hoy mismo para pagar, y otros no tienen hotel y están esperando a que la ANT les solucione”, comentó uno de los afectados.
Otro grupo de participantes denunció que a pesar de pertenecer a un pequeño grupo que al parecer tenía resuelto temas como el alojamiento, por lo poco claro de la información ofrecida por los funcionarios y colaboradores del Ministerio de Agricultura, tuvieron que costear hoteles o resolver el asunto a altas horas de la noche.
Finalmente, como si eso fuera poco, Petro volvió a amenazar con quitar la administración de Fondo Nacional del Café a la Federación. La experiencia vivida durante el gobierno de Juan Manuel Santos contra Fedegán y la improvisación con los recursos del Fondo Nacional del Ganado, no fue buena y terminó afectando duramente ese renglón de la agroindustria. Una de las consecuencias más graves para las familias ganaderas fue perder el estatus de país libre de aftosa.
APN Noticias
