Con la puesta en servicio del puente sobre la quebrada La Honda, en el municipio de Galán, el Gobierno de Didier Tavera Amado entregó una solución definitiva al problema de obstrucción de la vía que se presentaba en este sector por las lluvias y en cada creciente de la quebrada.
La nueva estructura reemplaza a la rústica batea que permitía el paso vehicular por la quebrada La Honda, donde la fuerza de las aguas ponían en riesgo la vida de pasajeros y peatones, especialmente de los niños que estudian en las instituciones educativas del sector.
El puente entró en funcionamiento esta semana después de superar la prueba de carga a que fue sometido por el constructor, para comprobar su resistencia y estabilidad, actividad que contó la supervisión de la interventoría, funcionarios de la Gobernación y habitantes de la zona.
William Celis Hernández, ingeniero residente de obra, dijo que en la prueba de carga se usaron 5 volquetas con 21 toneladas cada una, para un peso total de 105 toneladas, presentándose resultados satisfactorios, “porque se esperaban deformaciones de 3.95 centímetros y esta solo fueron desde 1.40 hasta 1.70 centímetros”.
El ingeniero agregó, que con esta prueba se da un parte de tranquilidad a la comunidad y se autoriza el tráfico de toda clase de vehículos por esta estructura, que comunica a Galán con El Palmar, El Hato, San Gil, El Socorro y las veredas Las Vueltas, Peña Grande y Boquerón.
Para esta obra, la Administración Departamental destinó más de 3.000 millones de pesos, que se invirtieron en ampliación de cauce de la quebrada, construcción del puente de 40 metros de longitud y muros de contención adicionales, ampliación de la banca y habilitación de un paso peatonal que no estaba contemplado en el diseño inicial.
