Por: Fredy Horacio Chinchilla Reyes/ La presente columna pretende concientizar a los lectores de una de muchas y más importante razones por la cual somos manipulados y gobernados a libre antojo por parte de nuestros dirigentes.
¿Quieren de verdad y de verdad saberlo? No sé si realmente le interese como todo lo que implique salir del status quo y es entendible pues el nivel de educación en nuestro país es tan bajo nivel educativo que leer no es precisamente el hobbie que “mate” de ganas a la mayoría de estudiantes y en especial a los de ultimo grado de educación secundaria, grado 11.
Pero, ¿qué nos indica el hecho de contar con un muy bajo nivel educativo? Es muy simple basta ver el subdesarrollo en el que está sumido gran parte del territorio nacional y no se requiere ser un gran gurú en temas económicos, sociales, etc…
¿Qué otro aspecto nos indica -por mencionar uno más- la baja calidad de la educación en Colombia? Según los resultados de las pruebas PISA (Es la sigla en inglés del Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos y mide la calidad educativa) del año 2016 estos son los resultados de Colombia entre 70 países. Ciencias puesto 57, Comprensión lectora puesto 54, matemáticas 61, cabe resaltar que estas pruebas miden estas tres áreas.
Ahora, para profundizar un poco más en el tema nos enfocaremos en otro de los aspectos que nos tienen en tan mal calificación en relación con el entorno educativo Internacional y que somos superados por países como Costa Rica, Uruguay y Argentina entre otros, solo por citar Latinoamérica.
Algo que muchos no saben es que en Colombia en los últimos 20 años no hemos avanzado ni un solo punto de calidad en educación, como lo afirma Julián de Subiría Samper, director de la Fundación Alberto Merani, entidad sin ánimo de lucro creada hace más de 25 años; con reconocimiento nacional e internacional por la construcción y aplicación de propuestas pedagógicas en procesos de formación y capacitación, con solidez pedagógica y didáctica para garantizar el aprendizaje por competencias y experiencia en el manejo de proyectos públicos y privados ejecutados a lo largo y ancho del territorio colombiano, siendo un importante referente en Colombia y Latinoamérica en materia de calidad educativa, luego Julián de Subiría Samper es una autoridad en esta materia.
Pero, ¿qué más se afirma respecto a la calidad educativa? Que en el mismo periodo de los últimos 20 años no se ha mejorado un punto en materia de inversión en educación pública, entonces nos han mentido vilmente que se ha invertido más en educación y eso no es cierto.
Si miramos la evolución que ha sufrido el gasto en educación vemos que en el 2015, Colombia dedicó el 15,05% de su gasto público total a educación, mientras que el años anterior había dedicado 15, 84% y cinco años antes el 16, 42% y si nos remontamos 10 años atrás el porcentaje fue del 15,54% del gasto público, es decir, la proporción destinada a educación ha caído en los últimos años, lo que agrava día a día la situación de la educación en Colombia y por lo tanto un deterioro progresivo de su calidad que cada vez es peor así los medios de comunicación informen lo que los gobiernos de turno necesiten que se diga lo contrario a la realidad y es llenarse la boca diciendo que hemos mejorado cuando las cifras muestran otra realidad. (Ver tabla)
La calidad de la educación pública en Colombia es de las peores y un ejemplo claro de esto y para ilustrar el tema, cuantos jóvenes que han estado por 10 años en la educación pública y que no descarta buena parte de la educación privada y que han pasado por un número importante de maestros 60, 70, 80 en fin. ¿Cuántos de esto jóvenes pueden leer de manera crítica? La cifra será para arrancarse los pelos u otra cosa de la frustración.
¿Te atreves a dar una cifra? 20% o mejor 30% ¡No que va! Eso es ser muy muy… Bueno no sé lo que se les ocurra. La cifra es realmente como película de terror, si en serio, pues les suelto ese misterioso dato y ahí les va: Menos del 1% si y si menos del esa minúscula cifra, ¿triste cierto? Pero eso que representa, tal vez eso no les diga mucho una fría cifra, pues lo explico de forma lo más sencilla posible.
Eso significa que un país donde no se maneja la lectura de forma crítica no se maneja con ideas sino con emociones, si así es con emociones les dice eso algo para su raciocinio.
¿Pero se preguntaran que es leer de forma crítica? Ahí les resuelvo el rollo: Es tomar un texto y decir este texto tiene esta idea pero se contradice, este argumento no es válido pues no respalda realmente la idea que se expresa, esta idea no la sustentó, esa idea no la concluye y ese autor está equivocado en esto por esta u otra razón, pero como la gente no lee y si vemos los niveles de lectura en Colombia es realmente bajo y para ratificar eso veamos cifras: El promedio de libros leídos por año en Colombia es de 2,9 libros y eso que mejoró, como dice el profesor ‘Super O’ un poquitico.
Si comparamos esto con países como Japón con la medio pendejadita de 47 libros por año, es decir, al mes más o menos cuatro libros, se leen en un mes más de lo que nosotros leemos, ¿cómo la ve mi apreciado “lector”? Y por el lado de Finlandia veamos a ver cómo nos va, pues la cifra son también 47 libros por año, estamos fritos.
Como no se lee y no se argumenta, pero para completar es bajo el nivel educativo, pues ahí una razón por que tal nivel de manipulación; pero lo más lamentable es que la clase política eso lo sabe pues con argumentos “de castro chavismo” (la derecha), o “los ricos son todos malos y explotadores” (la izquierda) cosa que no es cierta, aclaro; o cualquier otro argumento o el cuento que los padres le echan a sus hijos que ya viene el coco o la pata sola y esa pendejadas pues los políticos manipulan el país .
El foco real y central en Colombia es el bajísimo nivel, desde ahí parten casi todos los males de nuestra Colombia y no ser capaces como colectivo de transformar el país y desprendernos de ese cáncer que es la corrupción con sus honorables protagonistas “de novela”, nuestros honorables políticos.
Twitter: @fredy_asesor
