El Gobierno de Gustavo Petro radicó ante la Cámara de representantes la tan mentada reforma tributaria. La iniciativa, que busca recaudar cerca de $25,9 billones durante su primer año, se debatirá a partir de esta semana entre los congresistas.
Luis Carlos Reyes, director de la Dian, afirmó que la reforma se alinea con la Constitución de 1991 y cumple con ella en la medida en que será debatida en el Congreso de la República.
«No la vamos a discutir en ‘halles’ (pasillos), clubes sociales o a puerta cerrada. Cumpliremos con la constitución y lo haremos en el Congreso, este nuevo Congreso», precisó.
Renta de personas naturales
Según el documento radicado, para 2023 se espera un aumento cercano de $8,12 billones en este campo. Esto, representaría cerca de 0,56 del PIB y su promedio entre 2024 y 2023 llegaría a 0,59%.
El ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, afirmó que se gravaran a las personas naturales que reciban ingresos superiores a $10 millones mensuales a través de la limitación de beneficios tributarios con los que cuentan hoy en día.
Ocampo afirmó en la rueda de prensa que esta medida tiene como objetivo «corregir los problemas evidentes que han existido en los últimos años en el sistema tributario nacional».
Allí, agregó, los asalariados están teniendo una tributación «poco progresiva» y, las personas con altos ingresos están gozando de múltiples beneficios.
«Es evidente, y así lo muestran investigaciones de la Ocde, que entre más alto es el ingreso en el país, las contribuciones tributarias son más bajas», precisó.
Entre las exenciones que no irán más para los naturales están los descuentos provenientes de los créditos de vivienda, y el pago de educación, los montos de ahorro y la salud prepagada.
En cuanto al impuesto al patrimonio, este serpa complementario y, contrario a lo que se conocía ($2.000 millones) este gravamen se aplicará a los patrimonios que superen los $3.000 millones con una tasa menor a 1%. «Para los patrimonios superiores a $5.000 millones, se le aplicará una tarifa de 1%».
La evasión y elusión tributaria, apuntó Ocampo, también es «muy elevada», ya que según el nuevo MinHacienda, esta puede llegar a montos entre $50 y $80 billones. «Con la nueva reforma esperamos llegar a un recaudo cercano a los $50 billones anuales a través esta vía».
Impuesto a exportaciones de petróleo y carbón
La tasa llega a 10%. Este, junto a la renta de naturales, será el rublo que más le aportará al recaudo del primer año. Se espera que para 2023, según MinHacienda, llegue cerca de $5,87 billones por esta vía. Esto representaría 0,4% del PIB para el próximo año y 0,24 en el promedio 2024-2023.
Se incluirá a el carbón térmico y mineral a la base gravable del impuesto al carbono. La tarifa, que empezará en 0% en 2023 y 2024, se incrementará paulatinamente entre 2025 y 2028, cuando se espera que se llegue a una tarifa plena.
Ocampo se refirió a este impuesto como una «contribución especial». Esto, afirmó, a que se debe trasladar los beneficios de precios altos en el petróleo, carbón y el oro, a una mayor tributación.
Personas Jurídicas (Empresas)
Respecto a este sector, el nuevo proyecto de ley buscará recaudar más de $5,56 billones durante el próximo año. Lo anterior representaría alrededor de 0,38% del PIB y su promedio se acercaría a 0,62% entre los años de 2024-2023.
Si bien la tarifa seguirá igual (entre 35% y 38%), el proyecto de ley buscará eliminar varios beneficios tributarios, según Ocampo. «Esto vendrá acompañado con una forma más simple de tributación en un esfuerzo mancomunado con la Dian para aumentar la formalización».
Plásticos de un solo uso
Se gravará la venta e importación de los productos plásticos que se utilicen para envasar, ambalar o empacar vienes por una única vez. La tarifa será de $1,9 pesos por gramo (0,00005 UVT), lo que se traduce en que por cada kilo importado, se deberá pagar un gravamen de $1.900.
Se espera que para 2023, el recaudo por este impuesto logre recaudar cerca de $414,2 millones. Esto va de mano con la idea ambiental que se manejará en el nuevo Gobierno.
Bebidas azucaradas y alimentos ultraprocesados
Gaseosas, refrescos, embutidos, dulces, snacks y polvos para preparaciones, son los productos que se buscará gravar con el proyecto de ley. Las bebidas azucaradas se gravarían en función del contenido de azúcar y su implementación se haría respecto a los gramos de azúcar contenidos por cada 100 mililitros de bebida.
La medida, coordinada con la cartera de Salud Pública, espera llegar a un recaudo cercano a $1.026 millones en 2023. En cuanto a los alimentos procesados, el texto se propone una tarifa de 10% y su recaudo espera llegar a $1.091 millones en 2023.
Otros impuestos
Además, como se anticipó, el texto incluye cambios importantes respecto a la declaración y pago de renta para las personas naturales y una modificación a impuestos como el de la ganancia ocasional, el cual al día de hoy se encuentra en 10% para los bienes y 20% para los premios dados por los juegos de azar.
Adicionalmente, las transacciones internacionales tendrán su veeduría, puesto que las importaciones (hechas por internet) que vayan desde US$300 tendrán que pagar IVA. La medida también frenaría la triangulación de comerciantes que trasladaban productos a EE.UU. para que aplicarán las exenciones del TLC.
Por la línea internacional, la jurisdicción de las zonas francas también tendrán cambios, como se anticipó en LR, ahora deberán cumplir con un mínimo de exportaciones para mantener su beneficio tributario.
De antemano se espera que el tránsito del proyecto de ley por el legislativo no cuente con muchos inconvenientes o traspiés. Pues, además de tener una bancada numerosa en las dos cámaras, los congresistas independientes y de oposición han afirmado estar de acuerdo con varios puntos principales.
Ayer, durante su posesión el presidente Gustavo Petro afirmó que esta solo será una de las tantas reformas que impulsará su Gobierno. Además de la tributaria se espera que se tramiten también la pensional y la de salud.
