Este lunes 8 de julio salieron a la luz pública presuntas irregularidades en el concurso de méritos para directores regionales y subdirectores de centro del SENA, que van en contravía con los principios de la publicitada meritocracia.
Una fuente, quien participó para la sede de Málaga, oriente de Santander, reveló a Corrillos que en su sentir se vio afectado por esas presuntas irregularidades.
Resumió que “iba de primero en prueba de conocimientos, experiencia hoja de vida y fui uno de los afectados, me ubicaron 4 de 100 y al que iba de quinto le dieron 100 de 100”.
Manifestó además que no solo sale a los medios para hacer esta denuncia, pues antes de ello ya “radiqué denuncia ante Procuraduría General y en la Regional Santander”, comentó la fuente.
Dijo que se vio obligado a instaurar esta denuncia porque “el Servicio Nacional de Aprendizaje SENA, es una entidad que debe caracterizarse por su pulcritud y transparencia en los procesos de selección y contratación, teniendo en cuenta la importante labor que representa en el país”.
“En tal sentido – agregó – debe defenderse de manera incansable la meritocracia como principio fundante del Estado, así como, una función administrativa que garantice el interés general y como lo indica la Constitución, para que, los procesos de selección se fundamenten en los principios de igualdad, moralidad, eficacia e imparcialidad, entre otros”.
Dijo además que en la denuncia no está solo, debido a que algunos aspirantes de la Regional Santander también salieron a pronunciarse.
Explicación del proceso
En su denuncia, la fuente, quien participó para la sede de Málaga, explica el procedimiento. Comunicó que el concurso de méritos, se compone de cuatro pruebas, a saber: la de conocimiento con un porcentaje del 40%; la de experiencia u hoja de vida con un porcentaje de 25%; la de competencias socioemocionales con un porcentaje de 20% y la prueba oral o entrevista con un porcentaje del 15%.
En los municipios de Málaga, Floridablanca, Girón y Vélez por mencionar algunos, los aspirantes que obtuvieron los primeros puestos en las pruebas de: conocimiento, competencias socioemocionales y experiencia del nivel directivo, esto es, el 85% del total de la prueba, obtuvieron apenas 4 o 7 puntos de 100 en la prueba oral o entrevista (prueba con el mayor grado de discrecionalidad).
Cuando la meritocracia se habría perdido y entrarían otros factores, es cuando, según el concursante, “quienes iban en los últimos lugares u ocupaban puestos inferiores obtuvieron 100 de 100 puntos posibles, en esta última prueba (la entrevista), lo cual, es inadmisible, desde todo punto de vista”.
Aseguró que para todos los aspirantes “esta situación es inaudita, no deben permitirse presuntas irregularidades que dejen abrir las puertas a la politiquería, cuando lo que debe primar es la meritocracia”.
Respuesta demorada
El participante, quien se mantuvo todo el tiempo atento al proceso, destacó que “se conoció que las personas que solicitaron acceso a la información de la prueba oral (hoja de evaluación, grabación, notas de apuntes) tuvieron que esperar más de una hora para que se habilitara la información por parte de la entidad, sin que existiera una justificación clara”.
Dijo además que de igual forma “se verificó que en la “hoja de evaluación”, sólo aparece el nombre de uno de los evaluadores y se omite el nombre de los otros dos evaluadores a pesar de que registra una firma”.
Señalan que no son detalles mínimos en un proceso de meritocracia que debe ser transparente, por ello reitera que “esta denuncia se da a conocer a los Organismos de Control para que adelanten la debida investigación y se solicita a los representantes en el Congreso de la República determinar si estas posibles anomalías deben ser motivo de una proposición de control político, para que, esta situación sea revisada a nivel nacional, propendiendo por la transparencia y la imparcialidad de los concursos de méritos que se adelantan para los cargos de directores Regionales y subdirectores de Centro del Servicio Nacional de Aprendizaje SENA”.
Empató de la misma forma en que los Organismos de Control encargados de vigilar la actuación de los funcionarios públicos, “deben investigar a los evaluadores que tomaron esas decisiones para que se justifiquen las motivaciones que los llevaron a asignar calificaciones que sólo se entenderían para candidatos que fueron “ausentes” y que no corresponden con la escala establecida, en razón a que las posibles calificaciones a asignar para cada uno de los ocho ítems eran: 1, 4, 8, 12.5. Donde la calificación de uno correspondía a un criterio de “ausente” y como ya se indicó los evaluadores asignaron desde 4 pasando por 7, lo que se convierte en un irrespeto con funcionarios y exfuncionarios de la entidad que participan en el proceso y que desde hace varios años han ejecutado o ejecutaron de manera seria y responsable sus funciones, incluyendo las de subdirector que corresponden con el cargo de postulación”.
Explicado el asunto y los puntos en donde se habría incurrido en la ausencia de la meritocracia, el concursante se pregunta: “¿Si es un proceso meritocrático, cómo explica el director general y a los directores que ungieron de evaluadores, que los profesionales con los mejores resultados en prueba de conocimiento, con la mejor experiencia, resultado incluso de haber liderado proyectos al interior de la entidad durante varios años, sean evaluados como “ausentes” en una prueba oral y se les descalifique de manera irrespetuosa?”
Y subraya: “¿La actuación de los evaluadores responde acaso a presuntos favorecimientos de personas “recomendadas”, hasta el punto de otorgar puntajes de 100 de 100 para que lograran recuperar lo que no pudieron demostrar en las otras pruebas del proceso?”
Procuraduría General y la Regional Santander, según el denunciante, ya tienen aviso de esta situación. De momento el SENA continúa el proceso, hasta tanto algún organismo de control no se pronuncie.