El presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, consolidó su victoria en la contienda por la Casa Blanca al capturar el estado clave de Arizona, aunque la transición oficial hacia su administración continúa estancada porque el mandatario Donald Trump se rehúsa a reconocer la derrota.
Biden ha ganado en Arizona más de una semana después desde que comenzó el conteo de las elecciones del 3 de noviembre, dijo la noche del jueves Edison Research. El exvicepresidente es apenas el segundo candidato demócrata a la Casa Blanca en siete décadas en triunfar en el estado, un bastión tradicional republicano.
La victoria de Biden en Arizona le otorga 290 votos del Colegio Electoral, que determina el ganador de la presidencia.
Biden ya había soprepasado la marca de 270 votos necesarios para ganar en los comicios y se apresta a juramentar el 20 de enero. Los 11 votos electorales que ofrecía Arizona lo dejan con una ventaja insuperable respecto a cualquier reclamo legal que pidiera resolverse a favor de Trump.
Biden también tiene una ventaja de más de 14.000 votos en el estado de Georgia, por lo que es casi seguro que saldrá airoso del recuento manual de los sufragios. A nivel nacional, Biden ganó las preferencias por más de 5,3 millones de votos, o 3,4% puntos porcentuales.
Trump, el mandatario republicano, reclama -sin entregar evidencias- que hubo un extendido fraude en los comicios, pero las demandas que ha presentado en las cortes no han tenido acogida y las autoridades electorales en los estados no han reportado irregularidades serias.
A fin de quedarse en el poder por cuatro años más, Trump tendría que revertir el liderazgo de Biden en al menos tres estados, pero no ha encontrado evidencia que le permita desafiar esos resultados en tribunales.
Los estados tienen un plazo hasta el 8 de diciembre para certificar sus votaciones y escoger a los electores del Colegio Electoral, que elegirán oficialmente al nuevo presidente el 14 de diciembre.
La negativa de Trump a admitir la derrota ha estancado el proceso de la transición a un nuevo Gobierno. La agencia que entrega el financiamiento al presidente electo, el Servicio de Administración Federal, aún no puede reconocer el triunfo de Biden.
El próximo jefe de Gabinete en la Casa Blanca, Ron Klain, dijo el jueves a la cadena NSMBC que es especialmente crucial comenzar la transición ahora, ya que el Gobierno de Biden quiere preparar de inmediato la campaña de vacunación contra el Covid-19.
“Cuanto antes podamos reunir a nuestros expertos en transición con las personas que están planeando una campaña de vacunación, más fluida será el traspaso a la presidencia de Biden desde el mandato de Trump”, dijo Klain.
Independientemente de los impedimentos, Biden firmará una “pila” de órdenes ejecutivas y enviará un proyecto de ley de alta prioridad al Congreso en su primer día en el cargo, dijo Klain.