Por: Claudia Acevedo/ El estrés según hemos conocido es algo que nos ayuda a estar en alerta al peligro o activos ante cualquier situación.
Según se ha investigado en diversos estudios el hay dos tipos de estrés el estrés positivo y estrés negativo. Y que ambos son buenos y necesarios para el funcionamiento adecuado de nuestro organismo.
La pandemia nos cambió hábitos y costumbres y una de ellas fue la forma de trabajar ahora desde casa a través desde el teletrabajo, algo que nos obligó a convertir nuestra casa, sala o cuarto en oficina. Hasta nuestra forma de vestir cambió, muchos salen en sus videollamadas laborales con una camisa formal y un pantalón de pijama o sudadera. Ser padre, madre, trabajador, estar al tanto del hogar no fue fácil, ahora sumémosle a estás obligaciones que se nos caiga el Internet o se dañe el computador.
Sí es que ahora dependemos del funcionamiento adecuado del internet y de nuestros aparatos electrónicos que nos ayudan a la comunicación y cuando estos se dañan en plena llamada con tu jefe, se cae el internet en videollamada del trabajo, tu hijo grita cuando estás en video reunión con tus jefes, esto genera angustia, preocupación y por supuesto estrés, el cual es esa preocupación excesiva por cosas que aún no han pasado como un reporte por parte de tu trabajo por no conectarte a tiempo por no tener internet.
Ese estrés puede enfermarte si muchas de las personas que actualmente están laborando desde teletrabajo han enfermado de estrés, debido todas estas anteriores situaciones mencionadas, y como lo han manifestado a través de consecuencias en su cuerpo como obesidad, sedentarismo, glucosa alta, ansiedad, hábitos de sueños inadecuados lo cual genera una mala higiene de sueño, dolor de piernas, calambres, dolor de espalda; estar la mayor parte del día sentado trabajando levantado temprano y acostándose tarde, no es apropiado y más cuando te angustias y crees que el tiempo no te alcanza.
En mujeres el estrés de trabajar en casa y ser madres, esposa, hija las llevo a cambiar en su diario vivir hasta en su forma de vestir, muchas de estas engordaron por el estrés de estar laborando y ser madre desde casa, a otras el ciclo menstrual se le irregulo el periodo, se le cayó el cabello incluso les dio caspa en su cabeza de estar todo el día angustiada, preocupada por qué todo salga bien. Todo esto debido a que nuestro sistema hormonal se altera.
Unos consejos para disminución del estrés son los siguientes
1. Gestiona tu tiempo de manera eficaz
Aprovecha y organízate por medio de horarios y métodos de aprovechamiento del tiempo
2. No seas perfeccionista
Equivocarse hace parte de la vida y en ocasiones el error nos lleva al aprendizaje, no tengas miedo de equivocarte.
3. Practica yoga, meditación o deporte
Una manera efectiva de disminuir el estrés es por medio de la catarsis deportiva pues allí descargamos todas aquellas cargas que nos aquejan.
4. Come y bebe de manera saludable
Una buena alimentación genera los nutrientes que el cuerpo y el cerebro necesita para sentirse bien. Las comidas rápidas son deliciosas pero en exceso nos pueden afectar de forma significativa en nuestros procesos neuroquímicos. Los cuales también se encargan del estrés. Una dieta equilibrada con frutas, agua mineral, verduras y proteínas puede favorecer nuestro sistema nervioso.
5. Utiliza el humor y la risa
El humor puede ser una de las mejores técnicas para confrontar los problemas, al fin y al cabo entre más preocupación exista no demuestra que por sí solo el estrés disminuya. Toma las cosas con calma por que tarde que temnprano las cosas se acomodarán.
El estrés ha generado afectaciones graves y no tan graves en nuestra salud física y mental, hace parte de nuestro cuerpo y es necesario para activar nuestro sistema nervioso en pro de un objetivo a realizar. Si entendemos que es normal sentir estrés pero que también debemos controlarlo, podremos estar más tranquilos, sobre todo si seguimos los pasos anteriores. Como buenos santandereanos vivimos en un corre, corre diario, pero también deberíamos tomar un tiempo para respirar y que mejor que ver los atardeceres dorados de nuestra ciudad.
*Psicóloga y Co-fundadora de la LICMA Liga del Conocimiento y Salud Mental.
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