El pasado viernes, el Gobierno Nacional presentó desde Manizales los detalles de cómo se hará el plan de reactivación económica, marco en el cual se llegaron a acuerdos con líderes sectoriales, de gremios y de Gobierno.
Así fue el caso del sector minero energético, para el cual el ministro de Minas y Energía, Andrés Camacho, junto con gremios de energía, como Acolgen y Ser Colombia, encabezados por Natalia Gutiérrez y Alexandra Hernández respectivamente, así como Asocapitales y un representante de la comunidad de Canutal en Sucre, firmaron un acuerdo para lograr la reactivación del sector.
Algunos de los retos que se abordaron estuvieron relacionados con la expansión del sistema, particularmente en generación como en comunidades energéticas, para lo cual se requerirá de mayores recursos. También se mencionó el rol de la institucionalidad para habilitar la construcción de grandes proyectos.
Durante el panel “Transición Energética Justa, seguridad energética y reactivación económica”, Camacho destacó que ya se están tomando acciones que permitan una expansión del sistema, que lleve incluso a la exportación.
Precisamente, Gutiérrez destacó que el país se encuentra en una situación de presión en el balance de la oferta y la demanda, que plantea uno de los principales retos para los próximos años.
“Reactivación es inversión, pero en este caso es también contar con un servicio transversal para la economía”, dijo Gutiérrez, con lo que llamó a un trabajo mancomunado entre Gobierno y empresas.
De acuerdo con la líder gremial, cada año las empresas del sector energético ponen inversión por unos $14 billones, con lo que “lo único que necesitamos son señales”.
A su vez, Alexandra Hernández, presidente de la Asociación de Energías Renovables, señaló que el país tiene un gran potencial para generar con tecnologías como la eólica y solar. Destacó que si bien hay avances en los últimos meses, aún hay una capacidad de generación importante que está atrapada en La Guajira, por cuenta de dificultades de varios tipos en las regiones.
La líder señaló que “para lograr las metas de consumo que tiene el Ministerio de Minas y Energía, al 2027 debemos triplicar la capacidad de generación renovable”, con lo que se requieren acciones concretas.
Luz María Zapata, directora de Asocapitales, dijo en su participación en el foro que cada región tiene situaciones diferentes. Destacó el caso del Caribe, en el que el tema del costo de la energía es una de las situaciones más complejas. Sin embargo, también apuntó que en otras regiones como en Puerto Carreño hay situaciones como la deuda de Electrovichada con Refoenergy, que ha llevado a que se determinen cortes de energía de hasta 10 horas.
“Si estamos hablando de reactivación tenemos que pensar en esas ciudades”, afirmó Zapata.
En medio de una alerta por un posible déficit de energía para 2027, Gutiérrez señaló que se necesitan señales de mercado que permitan la expansión del parque generador. En este sentido dijo que es necesario que se presente al mercado una subasta de cargo por confiabilidad que cubra los faltantes que se proyectan para 2027 en adelante.
Otro de los puntos sobre los que hizo hincapié la presidente de Acolgen fue la necesidad de agilizar los procesos de consultas previas y licenciamiento ambiental, que ha significado en muchos casos que los proyectos tengan retrasos e incluso se cancelen.
Hernández dijo que se requiere de la participación de todos los energéticos en la matriz, puesto que son complementarios unos con otros; por esto, dijo que se requiere pensar en cómo se va a construir el sistema para que sea lo más diverso en términos de tecnologías.
Camacho, por su parte, destacó que hay una serie de retos de relacionamiento social, puesto que en muchas regiones donde se hacen grandes proyectos eléctricos hay altos índices de pobreza energética, con lo que el acceso y la calidad hacen parte de las necesidades.
Precisamente, Medardo Campo, presidente de la Junta de Acción Comunal de Canutal, en Sucre, explicó cómo con la implementación de proyectos fotovoltaicos han logrado asegurar el desarrollo en la comunidad.
“Debemos adecuar nuestra institucionalidad para resolver asuntos. Muchos proyectos están en Corporaciones Autónomas y hemos debido ayudarlos a fortalecer su estructura para que la transición energética se pueda acelerar”, dijo el ministro.
Compromisos
Camacho destacó que uno de los compromisos más fuertes para afrontar las dificultades que tiene el sector está relacionado con el desarrollo de municipios energéticos. Para esto explicó que se lanzó una línea de crédito junto con Findeter hasta por $1,6 billones para el desarrollo de estos en las regiones.
Durante el panel estimó también que en términos de inversión y financiación se ha trabajado en fortalecer los proyectos de Obras por Impuestos. La cartera destacó que se acogió la propuesta de Isagen de invertir cerca de $50.000 millones de pesos en proyectos de comunidades energéticas en el Atlántico.
Este fue uno de los llamados de Zapata, puesto que en regiones como Puerto Carreño la dificultad para tener energía impacta el progreso económico. Natalia Gutiérrez dijo que se debe avanzar en esto, puesto que su desarrollo no pelea contra los grandes proyectos sino que los complementa.
Camacho propuso nueve ejes de trabajo, como la electrificación del transporte, uso de fondos de regalías para proyectos de transición, implementación de comunidades energéticas, desarrollo de las municipios energéticos, creación de programas de eficiencia energética, líneas de crédito para techos sociales, también crédito para reconversión del sector minero y créditos para impulsar la cadena de valor de tecnologías renovables.
Durante el evento se habló del papel de varios sectores económicos y uno de los grandes faltantes fue la representación de entidades y gremios del sector de hidrocarburos, uno de los más relevantes para la economía nacional.
Vale la pena destacar que gremios como Campetrol y la ACP han advertido una decadencia en la actividad de esta industria, que vio por ejemplo en junio el menor número de taladros petroleros operando en los últimos tres años.
Sin embargo, durante la jornada no se mencionó el trabajo o compromisos para darle un impulso a este renglón clave para los ingresos fiscales del país.