En la más reciente sesión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, el presidente Gustavo Petro les dijo a todos los países del mundo que Colombia tenía problemas financieros que, de no resolverse, imposibilitarían el cumplimiento de las metas e indicadores propuestos en el Plan de Desarrollo.
Desde ese momento, el gobierno nacional no solo ha estado buscando culpables al poco flujo de caja, sino también, ideando ‘alternativas’ que permitan de una vez por todas darle a la economía colombiana el bastante dilatado estartazo.
Con el inicio de las sesiones ordinarias del Congreso de la República, Petro y su ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, han destapado las cartas con las que buscan hacerle frente al hueco fiscal que tiene en jaque la financiación de un número importante de planes, programas y proyectos.
Bonilla presentó hace poco menos de 15 días el Presupuesto General de la Nación (PGN) por un valor de $523 billones, aumentado en un 3,9% con relación al de la anterior vigencia, haciendo caso omiso a la endeble situación financiera de la Nación, asimismo, advirtió que radicará una nueva Reforma Tributaria que permita recaudar $12 billones y financiar el valor total del proyecto.
Esta alternativa ha sido rechazada de plano por un amplio sector de la opinión pública, especialmente los gremios empresariales y de la producción, pues, el aumento en los impuestos significa disminución de rentabilidad, situación que a la postre termina afectando a los trabajadores.
La otra propuesta que viene haciendo carrera en el ejecutivo, tiene que ver con las inversiones forzosas, que, según ha dicho el presidente Petro, significan tomar el dinero de los colombianos depositado en la banca pública y dárselo a las empresas necesitadas para reactivar así la economía.
“Del ahorro del público que está quieto en los bancos o en la cartera que se está deteriorando de manera creciente por la tasa de interés alta, podemos llevar una parte a Bancóldex, al Banco Agrario o al Fondo Nacional, para traducirlo hacia los sectores de la producción, industriales, agrarios, de mejoramiento de vivienda e incluso de turismo, porque es lo que nos puede reactivar económicamente”, dijo el jefe de Estado.
José Manuel Restrepo, exministro de hacienda, desestimó la propuesta del ejecutivo porque la práctica ha demostrado que son más las consecuencias negativas que los beneficios recibidos. Concretamente, advierte que el país puede verse abocado a tres grandes problemas: aumento en el costo del crédito, deficiencias en el proceso de asignación del crédito e incertidumbre en el sector financiero.
“La propuesta del Gobierno tiene un componente adicional porque pretende que el Gobierno mismo administre los recursos del ahorro de los ciudadanos para ofrecer esos créditos a los sectores que se pretenden reactivar. Eso genera mucha más ineficiencia, riesgos de burocratización, de politización y, eventualmente, de corrupción en la asignación de ese crédito”, dijo Restrepo en entrevista con Noticias Caracol.
A renglón seguido, vaticina la pérdida total de confianza en el ordenamiento jurídico colombiano, motivando la salida en desbandada de los empresarios del sistema financiero.
“Cuando hay la posibilidad de que el Gobierno asigne recursos para entregar esos créditos con riesgo de politización en la asignación y, entre otras, cuando el ahorrador nunca quiso que el Gobierno administrara esos recursos, porque por eso los asignó en un sector financiero privado, evidentemente se generan riesgos de salida de capitales, lo que puede generar complicaciones muy difíciles para la dinámica de un sistema financiero”, explicó el exministro de Hacienda.
Finalmente, dice que el mecanismo escogido por Petro para reactivar la economía podría funcionar si, en torno de este, se ejecutan acciones que posibiliten la eliminación de algunas barreras estructurales.
“Que el sistema financiero asigne unos créditos a esos sectores que son claves para la reactivación económica y que el Gobierno nacional subsidie parte de la tasa de interés de esos créditos, como sucede hoy con los subsidios de vivienda de interés social. Ese modelo podría ser exitoso y podría ayudar ya, rápidamente, a la reactivación económica”, puntualizó Juan Manuel Restrepo.
¿Inversión forzosa pondría en riesgo los ahorros de los colombianos en los bancos? ¿Es viable la reforma tributaria? ¿Cuál es una buena estrategia de reactivación económica? Hablamos con José Manuel Restrepo, exministro de Hacienda, para resolver esta y otras inquietudes… pic.twitter.com/np22Yo8EEU
— Noticias Caracol (@NoticiasCaracol) August 15, 2024
Lina María Peña / APN Noticias /