Telefónica dijo que escindirá las unidades de habla hispana de América Latina y que creará nuevas filiales de tecnología digital e infraestructura, parte de un plan para generar más de 2.000 millones de euros (2.200 millones de dólares) al año en ingresos adicionales al 2022.
Al igual que otras firmas de telecomunicaciones, Telefónica está teniendo problemas para lograr un sólido crecimiento de sus ganancias. Sus acciones, que alcanzaron su nivel más bajo en más de dos décadas en medio de condiciones de mercado cada vez más difíciles. Los títulos habían perdido el 9% de su valor este año antes del anuncio.
“Si no hacemos nada, el modelo se agota, por lo que debemos reinventarnos”, dijo el miércoles el presidente ejecutivo de la empresa española, José María Álvarez-Pallete, en una conferencia de prensa convocada inesperadamente después de una reunión del directorio para aprobar el plan.
Las nuevas medidas incluyen una “escisión operativa” del negocio de Telefónica en los países de habla hispana de América Latina, lo que deja a la compañía enfocada en sus mercados clave: España, Reino Unido, Brasil y Alemania.
Alvarez-Pallete dijo que la compañía realizará una revisión estratégica y que está abierta a fusiones y adquisiciones.
Telefónica espera que el aumento de sus ingresos provenga de una nueva unidad, Telefónica Tech, formada inicialmente al agrupar las áreas de ciberseguridad, Internet de las cosas y computación en la nube.
La firma también creará una unidad para mantener su cartera de torres de telecomunicaciones y otros activos de infraestructura, proporcionando servicios a otros operadores e incorporando socios.
Las torres de comunicaciones, en particular, han sido populares durante mucho tiempo entre los inversores institucionales debido a sus flujos de caja constantes. Por esto, los operadores buscan cada vez más sacarles provecho a medida que enfrentan los altos costos de implementar nuevas tecnologías.