Por: Diego Ruiz Thorrens/ Las encuestas de opinión son herramientas de investigación detalladas que generalmente captan los comentarios personales y puntos de vista dirigidos a un grupo específico de personas y requieren de tiempo de parte de los participantes. Esta herramienta de medición puede contar con múltiples preguntas que exigen al (o los) participante(s) una mayor reflexión sobre uno o varios temas en específico y en algunos casos pueden tener preguntas abiertas. Las encuestas de opinión se han convertido en una herramienta popular que busca generar confianza y, para el caso de los gobernantes o mandatarios, planear soluciones a futuros problemas.
No obstante, las encuestas de opinión también se equivocan… y mucho. En Colombia en los últimos años se han realizado encuestas de opinión que no cumplieron con las proyecciones o se acercaron a los resultados. Los ejemplos son múltiples: aquellas que daban como ganadores de la presidencia de la republica a Horacio Serpa (QEPD.) o al exalcalde de Bucaramanga Rodolfo Hernández, la segunda vuelta entre Galán y Bolívar, la alcaldía de Horacio José Serpa, por solo mencionar algunos. Sí, las encuestas de opinión son importantes, aunque no siempre captan los contextos sociales del momento o la real opinión de los encuestados.
El pasado 06 de abril la revista Semana publicó el artículo de “Los alcaldes de las principales ciudades fueron bien calificados. Encuesta revela que el de Bucaramanga es el más popular”. Párrafo seguido, la revista mencionó que: “Los mandatarios locales pasaron la prueba de los primeros 100 días, según la encuesta de Guarumo y Ecoanalítica para SEMANA. Jaime Andrés Beltrán, de Bucaramanga, es el más popular del país”. “El más popular del país”, a pesar que la encuesta fue local. La noticia fue publicada un día después del homicidio de Silvia Patricia Molina Grimaldos, mujer que murió por una bala perdida tras atentado sicarial en Bucaramanga ocurrido en el Barrio La Joya.
El pasado 29 de febrero, la administración de Bucaramanga publicó que “La favorabilidad no es del alcalde, es de Bucaramanga”, cuando las cifras hablaban del 61% de aprobación. A raíz de la información que publican los conocidos medios oficiales, en redes sociales, grupos de WhatsApp y sectores de opinión comenzaron a cuestionar la encuesta: ¿Cómo la aprobación del actual mandatario pasó del 61% al 88% cuando en los primeros meses de gobierno las cifras de violencia e inseguridad aumentaron ligeramente en comparación al 2023? ¿Podemos tomar en serio la encuesta y las cifras publicadas por la revista Semana?
Algunos sectores sociales no han perdido de vista la coyuntura y aparición de dicha encuesta. En las últimas semanas la ciudad de Bucaramanga ha afrontado graves fenómenos de violencia que han resonado negativamente en la región, algunos de ellos (1) el impacto ambiental causado por la devastadora extracción ilegal de oro en los terrenos ubicados en los barrios Nápóles y La Gloria de la comuna 4 y que ahora pone en riesgo la infraestructura del “puente de la novena”; (2) la inseguridad que afrontan algunas de las comunas donde anteriormente los casos de hurtos, agresiones e inseguridad eran menores, (3) la inseguridad que se vive en la zona comercial de la ciudad, especialmente, en los alrededores de la plaza de mercado central; y (4) las alarmas por el aumento de los agresiones, homicidios y sicariatos.
Desde que inició su administración, el alcalde de Bucaramanga viene impulsado su imagen trazando una línea de trabajo acorde a sus propuestas políticas y su plan de gobierno Bucaramanga avanza segura. No obstante, es preocupante que gracias a las encuestas de opinión la administración de Bucaramanga pueda afanarse más por consolidar su favorabilidad que por la ejecución de soluciones que aquejan a la ciudadanía, dejando atrás la razón por el cual un gran sector de bumangués lo eligieron: aumentar y garantizar la seguridad.
Sí, los sondeos y encuestas de opinión son herramientas importantes. Y es precisamente por lo importante que son que rechinan cuando aún existe un amplio sector social que percibe retrocesos en temas que son banderas de la misma administración.
Esperemos qué dirán o qué resultados proyecten las próximas encuestas de opinión y favorabilidad. Mientras tanto, me sumo a las voces que afirman que, “por sus acciones los conoceréis”. Amanecerá y veremos.
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*Estudiante de Maestría en Derechos Humanos y Gestión del posconflicto de la ESAP – Sede Santander.
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